Una de las primeras y felices iniciativas del alcalde Joaquín de Soto fue la construcción de unos jardines en la zona sur de la población que complementaran a los ya existentes en el Paseo de San Pablo.
Tremenda carga nostálgica tienen estas imágenes tomadas con motivo del campeonato de fútbol local en el recién estrenado campo de fútbol San Pablo. Carga nostálgica porque, tratándose de una competición local, los equipos de aficionados cubrieron el vacío que dejó el primer equipo representativo de la ciudad, protagonizando posiblemente, una de las mejores ediciones del campeonato local de fútbol aficionado.
Uno de los objetivos que se marcó, a mediados del siglo XIX, el alcalde de Écija Pablo Coello y Díaz fue terminar y completar el edificio del Ayuntamiento. La primera autoridad municipal en sesión celebrada el 23 de mayo de 1887 llevó al pleno la resolución del Gobernador Civil de Sevilla, por la que se aprobó el proyecto para continuar las obras de reedificación de las Casas Consistoriales, es decir, la parte comprendida desde el centro de la fachada a la sala capitular. Para llevar a cabo este objetivo era preciso adquirir la casa número 10 de la Plaza Mayor facultándosele en esta sesión para llevar a cabo cuantas gestiones fueran necesarias o convenientes.
La feliz iniciativa de Emilio Gómez de construir una piscina pública en un extenso huerto que comprendía la manzana formada por las calles Huerta, Sol, Rojas y Céspedes, próxima a la Parroquia de San Gil llenó de regocijo a los ciudadanos.
La piscina Écija popularmente conocida por piscina del "Boquilla", que regentó Luis Prieto Fernández fue inaugurada en el verano del año 1963, por miembros de la Federación Andaluza de Natación, delegado de Información y Turismo de Écija y deportistas del Club Natación.