
Un par de semanas antes de las elecciones, se publicaba en medios nacionales la noticia de que, según recientes estudios del CIS, los andaluces están viviendo un “desplazamiento ideológico subyacente y progresivo” hacia la derecha en los últimos años.

Algo está cambiando en los pueblos. No son el problema. Nunca lo fueron. Los graves problemas del mundo contemporáneo han surgido del ámbito urbano, en muchas ocasiones por mirar hacia otro lado y olvidar muchos conocimientos tradicionales que habían permitido la supervivencia durante milenios.