El portavoz de Turismo y Deporte de Podemos Andalucía, David Moscoso, realizó en el día de ayer, una visita a la localidad de ecijana en la que se reunió junto el concejal, Mario Perea, con el presidente del Club de Piragüismo Écija, Manuel Palacios, para mostrarle el apoyo del grupo parlamentario andaluz ante la sanción de 7.755 euros que le ha impuesto la Confederación Hidrográfica del Guadalquivir, por colocar unas cuerdas de entrenamientos sobre el río Genil que afectaban al correcto curso fluvial del mismo a su paso por Écija.
Moscoso, ha defendido que “esta sanción es completamente desproporcionada y ha lamentado la indefensión a la que se ha sometido a este club ecijano, ya que aun contando con diversas autorizaciones para el uso de este tipo de equipamiento por parte de la federación de piragüismo andaluza y estatal, y de la propia Confederación Hidrográfica, la sanción no les fue notificada debidamente en su sede social, llegando al extremo de tener conocimiento de la misma a través de un embargo de la Agencia Tributaria y sin posibilidad de recurso”.
El parlamentario de la formación morada, ha declarado que “existe un claro trato desigual en cuanto al criterio de impacto ambiental aplicado, ya que instalaciones deportivas para la práctica del piragüismo de mucho mayor calado, como las promovidas en Granada, Loja, Sevilla y recientemente en Puente Genil, no han sido objeto de crítica o sanción”.
Moscoso, también ha alegado que “puede que estemos ante un conflicto de competencias, ya que la gestión de las Instalaciones deportivas no convencionales, como la sancionada, dependen de las federaciones deportivas, que son entidades privadas pero con competencias públicas delegadas, como así recoge la Ley del Deporte de Andalucía”.
En este sentido, anunciaba que su grupo parlamentario va a solicitar la copia del informe técnico en el que se ha basado la Confederación Hidrográfica para aplicar dicha sanción, para verificar si los criterios aplicados han sido los correctos. Asimismo, confirmaba que va a solicitar una reunión entre el club de piragüismo afectado por la sanción y la Consejería de Turismo y Deporte, para clarificar si ha existido una invasión de competencias por parte de la Confederación Hidrográfica del Guadalquivir.