Las aguas del río Genil acogieron en la matinal de ayer domingo 25 de junio, la décimo cuarta edición del tradicional descenso Batán-Écija, en el que participaron más de trecientos piragüitas provenientes de distintos puntos del territorio nacional e internacional.
Esta gran fiesta de la piragua que organiza desde hace catorce años el Club de Piragüismo Écija en colaboración con el Ayuntamiento, consta de poco más de doce kilómetros sobre las aguas del río Genil, que son las que discurren desde la antigua central hidroeléctrica de Batán hasta el embarcadero que se encuentra ubicado en el parque San Pablo de la ciudad ecijana.
Una calurosa jornada, que comenzó como cada año con la inscripciones de los últimos piragüitas que se habían acercando al punto de encuentro, para posteriormente tomar la salida poco antes del mediodía de este tradicional descenso por las aguas del río Genil.
Donde pocos después de las catorce horas, empezaron a llegar los primeros participantes al embarcadero del parque San Pablo, un recorrido que los primeros piragüitas realizarían en poco más de dos horas, mientras que los últimos lo hicieron en unas tres horas y medias.