La alcaldesa y presidenta de la Corporación Municipal de Écija, Silvia Heredia Martín (PP), se ha referido este martes a la expulsión por reiteradas faltas de respeto del pleno ordinario de junio del concejal de Fuerza Ecijana, Ángel García Gómez.
Según manifiesta Heredia Martín, “tengo la obligación de velar por el buen funcionamiento de las sesiones plenarias, así como de garantizar el respeto institucional y el correcto desarrollo del debate democrático en el seno del Ayuntamiento de Écija.
En este marco, y amparándome en el artículo 95 del Real Decreto 2568/1986, que regula el Reglamento de Organización, Funcionamiento y Régimen Jurídico de las Entidades Locales, me he visto en la necesidad de llamar al orden y, finalmente, ordenar el desalojo del concejal don Ángel García Gómez durante la última sesión plenaria.
Este artículo establece que el alcalde o presidenta podrá llamar al orden a cualquier miembro de la Corporación que profiera palabras ofensivas, interrumpa reiteradamente o altere el desarrollo normal de la sesión. Tras tres llamadas al orden en una misma sesión, con la advertencia expresa de las consecuencias legales, se autoriza expresamente su desalojo del salón de plenos.
No es la primera vez que el señor García Gómez incurre en comportamientos inadecuados en el seno de este Pleno. De forma reiterada, y sesión tras sesión, realiza intervenciones fuera de tono, utiliza expresiones ofensivas y mantiene una actitud disruptiva que obstaculiza el normal funcionamiento de los debates y vulnera el respeto debido, tanto a esta institución como a sus miembros.
Esta alcaldía no puede ni debe permitir que se conviertan las sesiones plenarias en escenarios de crispación, enfrentamiento o falta de respeto, pues ello degrada el ejercicio democrático, daña la imagen del Ayuntamiento y, sobre todo, no responde al compromiso que todas y todos los concejales hemos asumido con la ciudadanía de Écija.
Reitero, por tanto, que la aplicación del artículo 95 se ha hecho conforme a derecho, tras tres llamadas al orden, con la debida advertencia, y en defensa del respeto institucional y del correcto funcionamiento de este Ayuntamiento.
Espero y deseo que en lo sucesivo impere la sensatez y el respeto entre los miembros de esta Corporación, porque la ciudadanía de Écija merece responsabilidad, trabajo y compromiso, no enfrentamientos estériles”, concluye la alcaldesa.
