Los trabajadores de Aqua Campiña, empresa público-privada que gestiona los servicios de abastecimiento de agua potable, alcantarillado y la Estación Depuradora de Aguas Residuales (EDAR) de la Ciudad de Écija, se concentraron nuevamente en la tarde de ayer a las puertas del Palacio de Benamejí para exigir el cumplimiento de la sentencia del mes de mayo que dicto el Tribunal Superior de Justicia de Andalucía (TSJA).
Una concentración en la que se dio lectura a un manifiesto que estaba firmado por los trabajadores y al que se sumaron los sindicatos y los grupos políticos con representación en la corporación municipal de Écija.
En el que se pide el cumplimiento de la sentencia judicial del TSJA, en la que se “reconoce los derechos laborales contenidos en el convenio colectivo de Aqua Campiña y que fueron arrebatados de forma unilateral e injusta por la dirección de la empresa”; según se recoge el texto del manifiesto, unos derechos “que estaban recogidos en el pliego de condiciones administrativas del Ayuntamiento de Écija por el que se realizó el concurso en el que se seleccionaba a Aqualia como socio privado para la gestión de estos servicios públicos”.
Una sentencia que parece que será recurrida por la empresa, en la que se obliga a aplicar el convenio colectivo que tenían los trabajadores y que fue incumplido por la dirección de la empresa durante el año 2013 al imponer uno nuevo de manara unilateral y sin negociación previa con sus trabajadores.
Aqua Campiña, es una empresa público-privada que esta compuesta por un 10% de capital del Ayuntamiento de Écija y un 90% del grupo FCC-Aqualia.