La Generalitat Valenciana concedió a finales de abril la Medalla de Oro al Mérito de Protección Civil, póstumamente, al piloto ecijano de ala fija, Ricardo García-Verde Osuna, de FAASA, que se dejaba la vida en acto de servicio cuando apoyaba las labores de extinción de incendios en la Región chilena de Bío Bío, en las proximidades de la localidad de Santa Juana (Chile).
Según pública el portal de información aeronáutica, aviaciondigital.com, este además es un homenaje a todos aquellos pilotos de incendios que sacrifican sus vidas, lejos de su tierra, ante la temporalidad de este oficio, tan poco reconocido aún en nuestro país. Son “jornaleros del aire”, que además deben recorrer miles de millas para seguir trabajando temporada a temporada lejos de casa.
El piloto nacido en Écija (Sevilla) fallecía en diciembre de 2016, a los 47 años de edad. Tenía 3.000 horas de vuelo en TTAA, 1.300 tipo en el que volaba en el momento del accidente, un Air Tractor, y era su segunda campaña de incendios en Chile.