estado de la cuenta de la chg

Declarada la emergencia por sequía en los municipios que se abastecen del Consorcio de Abastecimiento de Aguas “Plan Écija”

La Confederación Hidrográfica del Guadalquivir (CHG) ha declarado la “situación de sequía extraordinaria” en el 80% del territorio de la cuenca, en la que se encuentra el sistema de embalse del Bembézar-Retortillo que usa el Consorcio de Abastecimiento y Saneamiento de Aguas “Plan Écija” para abastecer de agua a las probaciones sevillanas de la Campiña y Sierra Sur ente las que se encuentra las localidades de la Comarca de Écija.

La declaración, aprobada por la Junta de Gobierno de la Confederación Hidrográfica del Guadalquivir (CHG), supone el paso previo para solicitar al Gobierno de España la aprobación de un real decreto ley en el que se adopten medidas urgentes para paliar los efectos de una sequía que comenzó en 2012 y que, salvo el periodo hidrológico de 2017 a 2018 en la que se alcanzaron unos valores medios de precipitaciones, aún no ha terminado.

En este sentido, el presidente de la CHG, Joaquín Páez, ha asegurado que el abastecimiento doméstico está asegurado para los próximos dos años, pero que actualmente la cuenca está en los 2.131 hectómetros cúbicos de los 8.115 que puede albergar, un 26,2% de su capacidad y si en ese periodo no se registran precipitaciones “la cosa se complicará”.

Una declaración de sequía extraordinaria que también implica la suspensión de todo el abastecimiento para regadío, actividad a la que normalmente se destina el 87% del agua, el 3% lo consume la industria y el 10% restante es para uso doméstico, así como, una serie de medidas como las restricciones al uso industrial, la reserva de 400 hectómetros cúbicos para el abastecimiento doméstico y la reserva de 100 hectómetros para mantener los cultivos de leñosos en caso de emergencia, ya que se trata de árboles que necesitan años de crecimiento, frente a los cultivos de herbáceos que se plantan cada temporada.

Además, la Confederación Hidrográfica del Guadalquivir (CHG) garantiza que solo se producirán desembalses para el mantenimiento de los caudales ecológicos mientras se mantenga la sequía y la ausencia de precipitaciones.