Comienzo este capítulo, lleno de sensibilidad poética, con una referencia a los primeros Juegos Florales celebrados en Écija, Octubre de 1903, en los que fue mantenedor el catedrático ecijano D. José Giles y Rubio. Se celebraron con gran brillantez y así apareció recogido en los periódicos de la época en el mes de Octubre de dicho año. Encontramos, en primer lugar, en El Nuevo Mundo del jueves 22 de Octubre de 1903, una pequeña crónica con fotografías del mantenedor, de la reina de los juegos y del poeta premiado, que las acompañamos a este y decía así:
Cronistas e investigadores afirman que Écija fue evangelizada por el mismo San Pablo. La antigua Astigi, la Écija de hoy, rivalizó con Tarragona en sus recuerdos paulinos. Tenemos que reseñar que San Pablo, Patrón de Écija. La festividad de nuestro patrón esta un tanto oscurecida y no cuenta en la actualidad con hermandad propia pese a tener aprobadas sus Reglas por el Arzobispado de Sevilla, con fecha 29 de enero de 1913.
Pasaron, llegaron y dejaron los Reyes Magos algunos regalos (y también nos han traído más frío del que estamos acostumbraos). Espero que se hayan portado bien con todos mis familiares, amigos y seguidores; conmigo no han estado mal, pues me han traído un teclado nuevo para poder seguir contándoles las cosas que, sobre Écija, me sigo encontrando.
Comienzo este nuevo año, en el que mi bella y maravillosa esposa me ha dado un nuevo cargo (como quiera que ya me he jubilado laboralmente, que no familiar y literariamente) cual es, “ agente de bolsa ” – coge la bolsa y llégate al Mercadona , coge la bolsa y llégate al Carrefour, coge la bolsa y llégate a…-
En la festividad de los Reyes Magos del año 1961, el Ayuntamiento de la Ciudad organizó la cabalgata que suscitó un extraordinario interés por parte de los ciudadanos y especialmente por los más pequeños. El cortejo salió del Cuartel de la Doma, donde se llevó a cabo la preparación de las carrozas. Abrió la comitiva la Banda de cornetas y tambores del Colegio salesiano de Nuestra Señora del Carmen. Los Reyes fueron representados por José Ostos Castilla, Gregorio Martínez Márquez y Manuel Martín González, que lucieron lujosas carrozas. Tal fue la expectación del desfile que el acudió multitud de gente.
Que tengamos noticias los primeros guardias urbanos que hicieron acto de presencia en las calles de nuestra ciudad fueron con motivo de la Feria del III Centenario en el año de 1952. A partir de esa feria el Ayuntamiento, ante el constante aumento del tráfico rodado y a la vista del peligro que suponían diferentes cruces estratégicos en el casco urbano, encomienda a la policía municipal regular el tráfico tanto rodado como peatonal.
Iniciamos este capítulo, con una noticia relacionada con el sacerdote, político y escritor español Vicente de Manterola y Pérez, nacido en San Sebastián el 22 de Enero o de Junio de 1833 y fallecido en Alba de Tormes en 24 de Octubre de 1891.
La Escolanía "Virgen del Valle" fue constituida en 1948 para los cantos propios de la Parroquia Mayor de Santa Cruz, principalmente para su misa mayor, salidas procesionales de la Santísima Virgen del Valle, Corpus Christi, Visitas de Impedidos, sabatinas durante el año y otras festividades extraordinarias de la referida Parroquia. Estaba formada por una veintena de jóvenes ataviados de monaguillos, sotana blanca y esclavina grana con el escudo de la parroquia.
Durante las décadas de los años cincuenta y sesenta del pasado siglo, la avenida Miguel de Cervantes, apodada “calle nueva” se convirtió en la arteria principal de Écija y gozó de gran esplendor. Fue un periodo en el que la avenida se convirtió en el reflejo de la ciudad. A esta imagen contribuyeron los cines de verano, los locales de ocio, las cafeterías y los salones recreativos. Sin duda alguna se trató de una vía llena de vida que tenía su máximo apogeo de noche, momento en que el bullicio de los cines de verano era extraordinario.
En esta mes de Diciembre en el que nos encontramos, solidario al máximo por las fiestas navideñas, aunque también nostálgico al por mayor, por lo menos para mí, viene como anillo al dedo escribir sobre una gran fiesta que celebraba Écija, idea de un ecijano, que dejó sus esfuerzos por los jóvenes ecijanos, llamados zagales, muchachos jóvenes del campo y a los que ayudó sobremanera, que se titulaba: